Qué hacer para optimizar tus imágenes de email marketing

Categoría: Consejos Email Marketing

El componente visual de una campaña de email marketing es muy importante para conseguir que los destinatarios comprendan mejor su contenido. Las imágenes son un elemento clave para hacerlo más atractivo y que suba el porcentaje de clics. Por eso hay que cuidarlas y optimizarlas antes de subirlas al editor de campañas: no deberías utilizarlas en tus envíos tal cual las tengas en tu ordenador. Te recomendamos que antes sigas estos consejos de nuestro equipo de diseño. 

 

Por qué optimizar las imágenes de tu newsletter

En email marketing, el objetivo final de la optimización es controlar el peso de toda la campaña porque, si es excesivo, puede hacer que no se vea completo, ralentizar la lectura y afectar a la entregabilidad tanto como a la reputación del remitente. El resultado puede ser menor conversión y aumento de las bajas.

Para confirmar que es una buena práctica, relacionamos las ventajas de la optimización de imágenes con una lista de varios errores si no se realiza esta tarea:

• Tardan en descargarse porque pesan demasiado: aunque sea un segundo de más, se magnifican en el gestor de correo y puede resultar frustrante para el potencial cliente. Por eso, un beneficio de optimizar las imágenes es dar una buena experiencia al usuario, sobre todo si sabes que tienen conexiones lentas.
• Tienen mala calidad porque se han redimensionado: puede ser por un descuido, pero cuando están borrosas o pixeladas afecta negativamente a la percepción de la empresa remitente. Si utilizas el tamaño y la extensión correcta, cuidas la reputación de la marca.
• Dificultan la lectura del contenido porque no se cargan: puede ocurrir por usar un nombre o carpeta errónea o porque el usuario las bloquea, pero las fotos han de ayudar a comprender el mensaje, apoyarlo, no complicarlo.
• No pensar en todos los usuarios: al hacer la campaña accesible, te aseguras de que todos los destinatarios podrán leerla y verla de la manera más cercana a cómo tú la has diseñado.
• Incluir el texto en la imagen: un error muy grave porque complica la interpretación del contenido. Separar los elementos facilita la lectura, especialmente en dispositivos móviles donde se ajusta a la pantalla el ancho de la foto y se reduce así el tamaño de la letra.

Un ejemplo más concreto: usar una única foto para toda la campaña es una mala práctica y demuestra que no está optimizada, por mucho que la propia imagen sí lo esté, porque si el usuario no tiene la opción de descargarlas, no verá nada. Hay que mantener un buen equilibrio entre imagen y texto porque se puede considerar el envío como spam, por eso también las fotografías han de cumplir una serie de requisitos.

 

 

Cómo reducir el peso de las imágenes en tus campañas

Hay muchos recursos visuales presentes en una plantilla de email marketing, como elementos fijos (cabecera, icono de sección) o imágenes que van cambiando (fotos, ilustraciones). Los primeros ya los tendrás optimizados en el editor de campañas, pero para los segundos tendrás que dedicar un poco de tiempo a optimizarlos.

Los tres factores que influyen en el peso de las imágenes son:

• Tamaño: redúcelo para que no sean más anchas de lo necesario, es decir, inferior a 580 px que es el ancho de lectura del correo electrónico en la pantalla de ordenador.
• Resolución: quizá las tengas en alta calidad (300 ppp), pero no se van a imprimir, por lo que con 72 ppp es suficiente para verlas bien en cualquier pantalla.
• Extensión: utilizar un formato comprimido como JPG, PNG o GIF es la mejor opción, igual que en cualquier web. Mejor evitar otras extensiones, como BMP o TIFF, porque no aportan mayor calidad pero sí más peso.

Hay diseñadores que siempre utilizan el mismo formato para simplificar la gestión de archivos, pero no hace falta, se puede elegir el más conveniente considerando el uso que se le va a dar. Por ejemplo:

• Si ha de ser transparente, JPG no lo es, pero carga muy rápido porque suele ser muy comprimido.
• Si ha de animarse, solo funciona en GIF, un formato que tiene limitado el número de colores, pero que sirve bien en logotipos sencillos.
• Si se trata de fotografías con degradados, JPG sería el más adecuado.
• Si te preocupa la calidad, apuesta por PNG, en comparación con JPG pesa un poco más, pero funciona bien para imágenes que incluyen algo de texto.

Hay muchas herramientas gratuitas de edición y conversión de imágenes para hacer todos estos ajustes. Una muy sencilla de utilizar es Imagify. Con ella puedes utilizar tres niveles de compresión y escalarlas al tamaño que quieras con un par de clics. Así puedes llegar a ahorrarte unos KB muy valiosos para hacer más rápida la descarga de todo el mensaje. 

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