Categoría: Consejos Email Marketing
Cuando se pone en marcha un negocio, se hacen muchos planes, incluidos de empresa y de marketing, para cuidar su futuro desde el día uno. Es habitual que se planifique para cubrir diferentes escenarios y que la newsletter aparezca como una herramienta de futuro que se suele aparcar hasta que se tenga un número mínimo de clientes a los que enviarla. Pero, ¿por qué no empezar a trabajarla antes?
Si tu negocio se basa en tu presencia digital, el email marketing no puede faltar en tu estrategia. Claro que primero necesitas tener una buena página web pero desde el mismo momento en que esté online puedes incluir el formulario de alta para tu newsletter. Y, si tienes un ecommerce, al primer cliente que compre también puedes suscribirlo (con su consentimiento, por supuesto).
No hace falta que un mínimo de suscriptores en la base de datos para enviar tu primera newsletter, puede que haya solo un par de ellos. Además, también te habrás dado de alta a ti y a tus compañeros de departamento o tus jefes así que seréis unos cuantos en recibirla. No esperes unos resultados abrumadores porque lo más seguro es que pase desapercibida y tengas unas estadísticas muy bajas.
Pero, precisamente por eso, te será muy útil porque podrás experimentar lo que quieras hasta encontrar el formato que mejor se adapte a tus recursos de manera que te permita gestionar cómodamente los envíos. Aprovecha y prueba diferentes plantillas y también contenidos editoriales de todo tipo. Intenta incorporar la newsletter a tu rutina, no la dejes de lado porque haya pocos suscriptores y no le veas rendimiento directo.
Cuando se cree que no se tiene tiempo para todo, la pregunta que muchos responsables de marketing se hacen es: ¿empiezo la newsletter antes o después de abrir perfiles en redes sociales? Nuestra respuesta es, ¿por qué no los dos a la vez? Piensa que ambos canales se pueden alimentar mutuamente, no tienen por qué ir separados.
La misma respuesta sirve para quienes se preguntan si merece la pena tener blog o newsletter: ¡los dos se complementan! Los posts que publicas pueden enviarse por correo electrónico de manera que no se duplica tu trabajo, si no que se aprovechan mejor los recursos para alimentar dos canales que combinan perfectamente.
No obstante, hay quien prefiere esperar a tener una base de datos suficiente como para sacarle rendimiento económico y hasta entonces lo único que hace es acumular emails sin enviarles nada de nada. Eso no es una buena práctica porque los suscriptores pueden olvidarse de que dieron su consentimiento y, aunque se empiece con un número alto, pueden lograrse más bajas de las deseadas tras los primeros envíos.
Te sugerimos un punto intermedio: empieza tu estrategia de email marketing desde el primer día, igual que la de social media. Y, a medida que amplíes la base de datos, adapta tu planificación para sacarle más rendimiento. Por ejemplo: al principio, haz envíos mensuales a toda la lista; después, cuando puedas segmentar, prepara newsletters más personalizadas y más frecuentes.
Construir una base de datos de calidad lleva tiempo, no se consigue rápidamente. Has de ir sumando poco a poco, suscriptor a suscriptor, cliente a cliente. Si empiezas a hacerlo desde el primer día, podrás ir asentando una buena relación con ellos. Si lo dejas para cuando tú los necesitas a ellos, te será más difícil ganarte su confianza.
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